domingo, 7 de marzo de 2010

EL AMOR DONDE NO OCURRE NADA

Amor es conocer a alguien en mayo y tener historias con esa persona nueva que no suceden. Inventar un país para vivirlo donde su presencia silencie el mundo real. Uno nunca sabe que lo que le está sucediendo es un hecho importante, como cuando sobre nosotros se desplomó un océano de silencios que convertí en una relación secreta para ti.

Descubrí que me hacía feliz verte, aunque yo no formara parte de esa vida que transcurría y que me fue llenando de desdicha oscura, de entretiempos donde entendí que eras incapaz de perderte en el juego y confesarte que te enamoraste.

Frené por que no le das importancia a lo que sientes en un alba que parecía perfecta. Después de eso temí, me hiciste sufrir al mirarte, doler de tenerte cerca, de sólo querer estar contigo. Entonces te busque en mí con violencia y paciencia, intenté horas donde estuviera emocionada por qué me abrazabas con fuerza de solitario irremediable. Tenías el encanto del mundo en los ojos con los que me provocaste tristeza en el corazón.

A veces fui feliz cuando hablabas acostado en el piso y querías que te entendiera, o cuando camine en medio del frio en la acera de calles solitarias mientras intentaba construir un por qué a las circunstancias. Quería que tú fueras yo o que sintieras que lo podías ser.

Como ese océano que nos inundó y devastó dejándome náufraga, ¿cuántas veces nos suceden cosas que no hemos planeado? He pasado por muchas luchas, te habrás dado cuenta que veo lo que tal vez no seas y pienso en la relación que nos has construido y de la que no hablaremos libremente nunca.

Sigo en la espera, siempre escuchándome. Sin tu tacto, sin tu cuerpo, sin tu olor, sin veneno, sin objetos, sin belleza, sin fruta, sin ruido, sin sabor, con miedo, con infelicidad, con melancolía, con vida, con sangre fría y pequeñas diferencias que me fortalecen cuando me siento desolada mientras manejo mi auto en el trayecto de tu casa a la mía.

Las personas que somos capaces de estar solas, más que cualquiera, le tenemos miedo a la soledad, pero la celebramos siendo arriesgados, quedándonos vulnerables ante lo que amamos, avanzando lo que sentimos por alguien hacia todo lo que lo rodea.

Mientras escribo, Jorge Drexler canta: ‘…y hoy solo fumo callado, cuando escucho hablar de amor, de ese fruto codiciado yo ya conozco el sabor, no vi la red escondida, la trampa esperándome’.

Aunque soy feliz a ratos, cuando consigues estar a solas conmigo y ser algo tan distinto a lo que pareces, actuando como si no ocurriera nada.

3 comentarios:

  1. Claramente abstracta tu entrada. La verdad me encanto! Demasiadas frases acertadas en mi estilo de vida. Felicidades, me gusta tu manera de mostrarte ante la red social. :)
    Excelente inicio de semana!!

    ResponderBorrar
  2. Claramente abstracta tu entrada. La verdad me encanto! Demasiadas frases acertadas en mi estilo de vida. Felicidades, me gusta tu manera de mostrarte ante la red social. :)
    Excelente inicio de semana!!

    ResponderBorrar
  3. Gracias por el comentario, me anima mucho dialogar por todos los conductos. Voy a pasar por tu blog...

    ResponderBorrar